Desde el organismo gubernamental del presidente Milei aseguraron que se vetará el proyecto aprobado por el Congreso de la Nación
El Gobierno de Javier Milei anunció que se vetará la nueva fórmula de movilidad jubilatoria aprobada este jueves por el Senado de la Nación con el fin de “sostener el superávit fiscal a toda costa”.
En un comunicado difundido en la cuenta de la red social X de la Oficina del presidente, se informó que “Javier Milei, tal cual se comprometió con los argentinos, vetará el proyecto aprobado hoy por el Congreso de la Nación que tiene como único objetivo destruir el programa económico del Gobierno”. Seguidamente, se indicó que el presidente “se comprometió con los argentinos a sostener el superávit fiscal a toda costa y así lo hará”.
Está claro que cuando dice “a toda costa” se refiere a que al gobierno no le importa la jubilación y mucho menos que los abuelos puedan estar un poco mejor, y accedan a sus medicamentos, hoy inalcanzables por la liberación de los precios de un mercado, que antes era regulado por el Estado.
En el texto se consideró que “el Congreso Nacional, en un acto de populismo demagógico, sancionó un proyecto de ley irresponsable, ilegal e inconstitucional que establece gastos exorbitantes sin su correspondiente partida presupuestaria, lo que implicaría necesariamente que el Gobierno vuelva a caer en las viejas prácticas de la emisión monetaria, el aumento de impuestos, o el endeudamiento, que son las mismas recetas que nos han llevado al fracaso durante los últimos 100 años”.
Lo extraño, y lo que no dice el comunicado, es que el gobierno sigue emitiendo pesos, y ya van por la Serie C, lo que hace dudar de las excusas que se esgrimen para vetar el aumento a los jubilados.
Además, se argumentó que “esta ley implica un gasto adicional del 1,2% del PBI, o lo que es lo mismo, 25% del PBI en términos dinámicos, obligando al Estado a contraer deuda que deberán pagar en el futuro los jóvenes argentinos que, gracias a medidas como ésta, hoy son mayoritariamente pobres”.
En referencia a los legisladores que dieron luz verde a dicha iniciativa, criticaron: “Mientras acusan a este Gobierno de licuar a los jubilados, desde enero las jubilaciones han aumentado un 5% en términos reales mientras bajamos el gasto y destruimos la inflación”.
Se reiteró que “el proyecto sancionado este jueves con la anuencia de todos los partidos políticos es una estafa moral, un acto de demagogia populista y una irresponsabilidad fiscal; y por lo tanto será vetado por este Gobierno, el cual no tiene miedo de pagar los costos que hagan falta para sacar a este país de la decadencia en la que nos han sumergido. Confiamos en que los que durante años se han amparado en el cambio no se presten al juego de quienes quieren destruir el programa económico del Gobierno”. Horas más tarde, Macri y Milei se reunieron en Olivos.
El escrito cerró con la siguiente advertencia: “Es tiempo de que la dirigencia política elija de qué lado quiere estar: del lado de los que queremos una Argentina distinta luego de décadas de fracaso, o del lado de los extorsionadores que utilizan la política para su propio beneficio personal”.
Hay que recordar que el presidente Milei había prometido y jurado no subir impuestos y que, de suceder, se cortaría un brazo (…) lo que también es una estafa moral y real, en primer lugar, a todos los argentinos, pero especialmente a quienes lo votaron, creyendo que sus promesas “no eran de campaña”